WYSIWYG Web Builder
Copyright © 020 BITINFO Informática
Rev- 165.12b 01/01/2020
Información Legal
Vuelo Histórico cruce del Atlántico 1933
Sevilla (España) - Camagüey (Cuba)
Revista ABC de la época con Barberán, collar y el Cuatro Vientos. 1933
Replica del Cuatro-Vientos en el Museo de Aeronáutica y Astronáutica España.
Monumento construido en honor a Barberán y Collar en Camagüey (Cuba)
Sello conmemorativo del vuelo
       En 1932 el Capitán de Ingenieros D. Mariano Barberán y Tros de Llarduya, nacido en Guadalajara (España) el 14 de octubre de 1895, Director de la Escuela de Observadores de Cuatro Vientos y héroe de la Guerra de Marruecos, habiendo adquirido un reconocido prestigio como navegante en la preparación del Vuelo del Plus Ultra, concibió la idea de realizar un vuelo sin escalas desde España a las Antillas.

       Fue designado como 1º Piloto el Teniente de caballería D. Joaquín Collar Serra, natural de Figueras (25 de noviembre de 1906) y profesor de la Escuela de Caza de Alcalá de Henares, y como 2º piloto y navegante el propio Barberán.

       Para actuar como mecánico de asistencia en tierra se eligió al Sargento D. Modesto Madariaga natural de Corral de Almaguer, profundo conocedor del aparato que había de utilizarse en el vuelo.


       Según una revista profesional de la época se comentaba “Persigue varias finalidades de extraordinario interés. En primer término ha de construir un nuevo enlace entre España y América, que servirá para testimoniar el fraternal cariño que la República Española siente por las Repúblicas americanas de su misma raza y especialmente para que las alas españolas lleven el saludo cordial del viejo solar hispano a la República de Méjico, que no ha sido visitada por aviadores españoles…”.

       “El vuelo del “Cuatro Vientos” ha de servir también para estudiar una nueva ruta aérea sobre el Atlántico…, que un porvenir no muy lejano será el camino que seguirán todas las comunicaciones entre Europa y América Central. Finalmente, la realización del vuelo pone de manifiesto la capacidad y competencia de los aviadores españoles, el extraordinario interés que la República Española siente por el progreso de la aviación y la perfección a que ha llegado la industria aeronáutica en España

La revista no decía que era condición importante la máxima participación nacional.
El avión era un Breguet XIX GR (Gran Raid) llamado Super-Bidón, sesquiplano, con motor Hispano Suiza 12 Nb de 650 caballos y 12 cilindros en V. Fue fabricado especialmente para la ocasión totalmente en España, ampliando aun más la capacidad de su gran depósito, lo cual dada su posición en el centro de la estructura equivalía casi a rediseñar por completo el avión. Llevaron 5.000 litros de gasolina en 8 depósitos y 200 de aceite. Tenía la cabina cerrada y un panel de instrumentos de vuelo muy completo con instrumentos de motor, dos brújulas, un altímetro, un variómetro, un reloj integral de vuelo con anemómetro, indicador de virajes y de inclinación transversal.
        En la madrugada del 9 al 10 Junio de 1933 los pilotos españoles Mariano Barberán y Joaquín Collar despegaban la nave los “Cuatro Vientos”, del aeropuerto de Tablada en Sevilla, España. Así comenzaba, una de las mayores hazañas de la Aviación universal. El vuelo constaba de dos etapas, la  primera, llevar a cabo un vuelo, que hasta la fecha, nunca se había realizado, de España a Cuba, sin escalas alguna y una segunda etapa, de Cuba a México.


      Con una distancia de 6.000 kilómetros iba a ser la mayor distancia que se recorriera hasta la fecha en una aeronave sobre el mar. Otro de los riesgos de la hazaña era que por primera vez se hacía un viaje directo de un continente hasta una isla. No había espacio para el más mínimo fallo de navegación. A pesar de esto, el peligro no dejaba de estar latente: primero porque el avión contaba con un solo motor y segundo porque un mínimo desvío de su trayectoria malgastaría el combustible y haría imposible el aterrizaje en tierra.
Llegada a Camagüey del Breguet en el vuelo oceánico Sevilla - Camagüey
Frontal del avión Breguet original que volaron Barberán y Collar en el vuelo Sevilla - Camagüey
El cruce del Atlántico central fué la mayor distancia volada hasta ese momento sobre el mar. Siguieron la ruta prevista con desviaciones mínimas a pesar de diversas incidencias, como una indisposición de Collar: Tablada (Sevilla), Madeira, San Juan (Puerto Rico), Guantánamo y Camagüey, donde llegaron 11 de junio a las 20:45 hora local después de 39 horas de vuelo y 7320 km.

      En Cuba, tuvieron un recibimiento casi apoteósico. El vuelo constituyó un acontecimiento social de primera magnitud y los aviadores fueron agasajados en los círculos políticos, sociales y mercantiles de Cuba. En los días que pasaron allí Madariaga el mecánico de apoyo en tierra tuvo que hacer frente a una incidencia ocurrida durante la travesía:

      Reparar una grieta aparecida en el gran depósito central. También tuvieron tiempo para realizar una visita al Observatorio de Belén, desde donde el padre jesuita Mariano Gutiérrez-Lanza elaboró los partes meteorológicos. Un controlador aéreo de la época, Francisco Figueroa, relató que los pilotos recibieron el consejo de suspender el siguiente vuelo hacia México al menos durante 24 horas debido a las malas condiciones meteorológicas, aunque finalmente partieron según la fecha prevista.

        La travesía hacia México comprendía un vuelo de 1.920 km que estaba previsto se realizase en unas 12 horas. El 20 de junio despegaron de La Habana a las 08:45 h hacia Ciudad de México y fueron vistos sobre Ozita a las 09:10 h, Ticul 10:10 h, Sabancu a las 10:45, y Carmen a las 11:35, cerca de la ciudad de Villahermosa en Tabasco, a partir de esta posición desaparecieron.  Los gobiernos de México y Guatemala desplegaron numerosas operaciones de búsqueda y a pesar de los esfuerzos realizados, no pudo darse con el lugar de caída del aparato, un misterio que ha dado lugar hasta el día de hoy a numerosas teorías y especulaciones, creando un halo de misterio y leyenda acerca de cual fue el fin del Cuatro Vientos y sus tripulantes.

       De entre las hipótesis más barajadas, la que ha cobrado mayor fuerza con el paso del tiempo, de mano de historiadores españoles y mexicanos, así como por expertos en aviación es la de que en medio de una tormenta que se calificó como "un temporal como pocos hemos visto en esta época" obligó a la tripulación a realizar una toma forzosa en la sierra de Mazateca (Oaxaca). En la toma, Barberán, en la posición delantera de piloto quedaría seguramente malherido. Collar, en su posición más protegida pudo estar en condiciones de salir a buscar ayuda. En la búsqueda se encontraría con lugareños que les retuvieron secuestrados varios días creyendo que podrían robarles objetos de valor. Finalmente, quizá por frustración, quizá por temor a mayores consecuencias por sus actos, los secuestradores asesinaron a los tripulantes del Cuatro Vientos, que habría sido desguazado y enterrado junto con los cadáveres en algún lugar de la serranía. Si las autoridades mexicanas llegaron a conocer estos hechos, jamás se atrevieron a reconocerlos ante el Gobierno de España por las gravísimas implicaciones diplomáticas. Aún hoy en día sigue sin saberse nada del final del Cuatro Vientos.
Agradecimientos y datos obtenidos de:


Archivo Histórico del Ejército del Aire del Reino de España

Fundación Infante de Orleans - Cuatro Vientos

Hemeroteca de la "TV Camagüey" en Camagüey - Cuba

Wikipedia Enciclopedia libre On-line

Hemeroteca del periódico diario "ABC" edic. de Sevilla

Hemeroteca del periódico diario "La Vanguardia" de Barcelona

Museo del Ejército del Aire (E.A.)

Y particulares aficionados a la aviación histórica